Romance que se canta en Velilla con motivo de la merienda de los danzantes de san Nicolás de Bari. CSIC centro de documentación etnográfico.
La villa de Sariñena
por todas partes nombrada.
donde había una doncella
discreta y muy bien hablada.
Los galanes la pretenden
y a ella ninguno le agrada,
si no es un galán de prendas
que en el alma lo llevaba.
- Mañana que voy a Palma,
¿el que querrás que te traiga?
- Con tal que tu vengas bueno
no quiero que traigas nada.
- Te traeré cruz y pendientes
y una sortija de plata.
- Si todo eso me trajeras,
sería tu enamorada,
no para un día ni dos,
ni tampoco una semana,
sino para una eternidad,
hasta que Dios nos desparta.
Machado: "La plaza tiene una torre" de Romance Apócrifo
La plaza tiene una torre,
la torre tiene un balcón,
el balcón tiene una dama,
la dama una blanca flor.
Ha pasado un caballero
-¡quién sabe por qué pasó!-
y se ha llevado la plaza,
con su torre y su balcón,
con su balcón y su dama,
su dama y su blanca flor.
https://youtu.be/tmNsGRvcPow
Soneto - Primer Renacimiento
Garcilaso de la Vega
Soneto XIII – A Dafne ya los brazos le crecían
A Dafne ya los brazos le crecían,
y en luengos ramos vueltos se mostraba;
en verdes hojas vi que se tornaban
los cabellos que el oro escurecían.
De áspera corteza se cubrían
los tiernos miembros, que aún bullendo estaban:
los blancos pies en tierra se hincaban,
y en torcidas raíces se volvían.
Aquel que fue la causa de tal daño,
a fuerza de llorar, crecer hacía
este árbol que con lágrimas regaba.
¡Oh miserable estado! ¡oh mal tamaño!
¡Que con llorarla crezca cada día
la causa y la razón porque lloraba!
Federico García Lorca - Generación del 27
"Llagas de amor"
Esta luz, este fuego que devora.
Este paisaje gris que me rodea.
Este dolor por una sola idea.
Esta angustia de cielo, mundo y hora.
Este llanto de sangre que decora
lira sin pulso ya, lúbrica tea.
Este peso del mar que me golpea.
Este alacrán que por mi pecho mora.
Son guirnaldas de amor, cama de herido,
donde sin sueño, sueño tu presencia
entre las ruinas de mi pecho hundido.
Y aunque busco la cumbre de prudencia
me da tu corazón valle tendido
con cicuta y pasión de amarga ciencia.
Décima - RENACIMIENTO-SIGLO DE ORO
Vicente Espinel (bio)
No hay bien que del mal me guarde,
temeroso y encogido,
de sinrazón ofendido,
y de ofendido cobarde.
Y aunque mi queja, ya es tarde,
y razón me la defiende,
más en mi daño se enciende,
que voy contra quien me agravia,
como el perro que con rabia
a su mismo dueño ofende.
Fuente: Vicente espinel, la décima espinela y lo que de ellos dicen los decimistas.
Jorge Drexler
https://youtu.be/C2p42GASnUo
Ángel González - Autor de la Poesía de postguerra española a nuestros días y novela
"Otro tiempo vendrá" por Ángel González
Otro tiempo vendrá distinto a éste.
Y alguien dirá:
«Hablaste mal. Debiste haber contado
otras historias:
violines estirándose indolentes
en una noche densa de perfumes,
bellas palabras calificativas
para expresar amor ilimitado,
amor al fin sobre las cosas
todas».
Pero hoy,
cuando es la luz del alba
como la espuma sucia
de un día anticipadamente inútil,
estoy aquí,
insomne, fatigado, velando
mis armas derrotadas,
y canto
todo lo que perdí: por lo que muero.
Ángel González, poeta de la Generación del 50 - 60 Poesía de la postguerra a nuestros días
"Menos dos alas" canción dedicada al poeta Ángel González por Joaquín Sabina
González era un ángel menos dos alas
Gonzalez era un santo por lo civil
Un dandy con un ojo a la funerala
Tan rojo, tan castizo y tan zascandil
Gonzalez era un santo por lo civil
Un dandy con un ojo a la funerala
Tan rojo, tan castizo y tan zascandil
Hilaba en los garitos de mala nota
Boleros de Machín con Juanín de Mieres
Apurando esos whiskys en los que flotan
La luna de las golfas y los crupieres
Boleros de Machín con Juanín de Mieres
Apurando esos whiskys en los que flotan
La luna de las golfas y los crupieres
Cuando volvía del extranjero
Tan forastero
A las dos no era de día
A las seis ya era de noche
Pídame un coche
Fumando espero
Y le aplaudían los camareros
Tan forastero
A las dos no era de día
A las seis ya era de noche
Pídame un coche
Fumando espero
Y le aplaudían los camareros
Otoños y otras luces, pan con verbenas
Su príncipe de Gales, tan Cortefiel
Tratado de urbanismo, Juan de Mairena
Chicana, magdalena, tinta y papel
Su príncipe de Gales, tan Cortefiel
Tratado de urbanismo, Juan de Mairena
Chicana, magdalena, tinta y papel
Verde por la vergüenza que no tenía
Hasta ayudó a Caronte a quemar sus naves
Decía que morirse no era tan grave
Y agonizó en voz baja por cortesía
Hasta ayudó a Caronte a quemar sus naves
Decía que morirse no era tan grave
Y agonizó en voz baja por cortesía
Cuando volvía del extranjero
Tan forastero
A las dos no era de día
A las seis ya era de noche
Pídame un coche
Fumando espero
Y le aplaudían los camareros.
Tan forastero
A las dos no era de día
A las seis ya era de noche
Pídame un coche
Fumando espero
Y le aplaudían los camareros.